Discurso de cierre de campaña 2018 del presidente electo: Andrés Manuel López Obrador

Transcripción, investigación, edición, ilustración y producción de Sonia Uberetagoyena Loredo

poliecosocial.com, partidaria de la inclusión de las personas, en particular de aquellas con discapacidad visual, ofrece el material escrito, en audio, a fin de posibilitarles, desde el estudio, hasta la recreación, la filosofía, la política,…

 

El Discurso de cierre de campaña, de Andrés Manuel López Obrador, por la Presidencia de México, para el período  2018-2024,  es el motivo de la presente transcripción.

La importancia de la disertación, calificada como excelente en diversos medios y, seguramente histórica, como histórica es la victoria en la elección presidencial (53.19% del voto); en el Congreso de la Unión y en las alcaldías de la Ciudad de México; estriba en que después de más de treinta años de gobiernos regidos por idearios, cuyos resultados en materia de pobreza, de concusión, de  violencia, de empleo, de oportunidades, de deterioro ambiental y renuncia a los recursos nacionales, entre otros, han desfavorecido, profundamente, a los mexicanos…

[Morena, PT y PES alcanzarían 68 (53.13%) de un total de 128 legisladores en el Senado, al menos 5 gubernaturas -CDMX, Tabasco, Chiapas, Morelos, Veracruz-, alrededor de 307 diputaciones (61.40%) y una ventaja de 11 de 16 alcaldías (68.75%) de las demarcaciones capitalinas (UNOTV.com)]

La voluntad ciudadana se expresó en las urnas, con un recuento de votos considerado como el más numeroso de la historia democrática del país, de 117,634 actas, lo que equivale al 75% de los paquetes recibidos en los 300 consejos distritales del país, resultante de una votación total que supera los 56 millones de votos y, representando el triunfo de Andres Manuel López Obrador, como presidente electo de la república Mexicana, el 63.42% de participación de los ciudadanos inscritos en la lista nominal de electores [© Cuartoscuro. (8/07/2018). Tras el cómputo distrital, el INE confirma los resultados de la presidencial . 9/07/2018, de © Cuartoscuro Sitio web: https://bit.ly/2N1aUTf].

Este 1 de julio de 2018, el pueblo de México, ha optado por la esperanza,… de que esas consecuencias no sólo sean revertidas…, sino también, a que la prospectiva, sea, precisamente de evolución en lo técnico, científico, económico y social, que aceleren el cambio moderno, ¡que requiere México!...

EL DISCURSO

Amigos, amigas, con este acto festivo, llegamos al final de la campaña 2018. Hay entre la gente, entre ustedes, una alegría contagiosa y vibrante, porque el ánimo de la sociedad y las encuestas indican que, vamos a ganar las elecciones del próximo domingo (primero de julio de 2018).

Estamos a punto de comenzar la cuarta transformación en la historia de México y de convertir en realidad los sueños de muchos mexicanos, de antes y de nuestro tiempo,… porque lo que vamos a consumar viene de lejos y se ha fraguado, con el esfuerzo y la fatiga de muchos compañeros, hombres y mujeres, de distintas clases sociales y corrientes de pensamiento, que en su momento lucharon, por las libertades, la justicia, la democracia y la defensa de la soberanía nacional.

“La democracia es el destino de la humanidad futura; la libertad, su indestructible arma; la perfección posible, el fin a donde se dirige”  [Benito Juárez García]

Recordamos, con admiración y respeto, a quienes han participado, a lo largo de los años, en movimientos sociales y políticos, recordamos a campesinos, obreros, estudiantes, maestros, médicos, ferrocarrileros, defensores de derechos humanos y de otras causas.

Aquí destaco, la participación de los jóvenes del “68” y de dirigentes de oposición, como Valentín Campa, Demetrio Vallejo, Rubén Jaramillo, Othón Salazar, Alejandro Gascón Mercado, Heberto Castillo, Cuauhtémoc Cárdenas Solórzano, Salvador Nava, Manuel Clouthier, Porfirio Muñoz Ledo, Ifigenia Martínez y Doña Rosario Ibarra de Piedra, a quién rindo un homenaje. Les adelanto que el primero de julio, el domingo próximo, ¡voy a votar por ella!

Lo alcanzado, en los últimos tiempos, se lo debemos a muchos mexicanos,… de todas las regiones, de todas las culturas, de todas… las clases sociales. En este día memorable, recuerdo con cariño a José María, a mi amigo entrañable, Chema Pérez Gay; a mi maestro Arnaldo Córdova; a Luis Javier Garrido; a Hugo Gutiérrez Vega; a Julio Scherer García; a Sergio Pitol y, a un hombre extraordinariamente inteligente y comprometido con las causas sociales, Carlos Monsiváis.

Celebro, que sigan con vida y con el ánimo siempre joven. Celebro que estén todavía con nosotros, Elenita Poniatowska, Fernando del Paso y Carlos Payán.

Nunca olvidaremos a dirigentes sociales, campesinos, obreros, indígenas, amigas, amigos, gente sencilla del pueblo, buena, que empezó la lucha con nosotros, y se nos han adelantado, mujeres y hombres que fallecieron,… deseando ver y vivir este momento. Estoy seguro, que en la noche del domingo, desde el cielo, van a celebrar el triunfo que ellos ayudaron a construir.

La victoria del domingo, se ha ido concretando con la abnegación de muchos. No surge de repente; ni brota únicamente del malestar que provocó el antiguo régimen autoritario, en los últimos tiempos, y que está ese régimen corrupto, llegando a su fin…

¡Los frutos!… que ahora comenzarán a recogerse, vienen también de la siembra de ideas, del trabajo, de la perseverancia de dirigentes políticos, de todos los niveles y de todas las regiones de México.

Cómo aquí se dijo, de… millones de voluntarios, de brigadistas, que visitan casa por casa, repartiendo desde hace años, el periódico “Regeneración”. Muy poco ha sido espontáneo, o ha quedado al azar. Con anticipación, decidimos poner las ideas por delante, apostar sin titubeos, sin medias tintas, a la vía pacífica y aplicar las premisas de que !sólo el pueblo puede salvar al pueblo y, que sólo el pueblo, unido y organizado!, ¡puede salvar a la nación!

El trabajo que se ha realizado en estos últimos años, cómo les consta, ha consistido en hacer conciencia sobre la necesidad de lograr, mediante la organización y la participación de los ciudadanos, un cambio verdadero.

Poco a poco, la ciudadanía ha ido cobrando conciencia, de algo,… que no es necesariamente evidente: la  existencia y el predominio de una mafia del poder. Asimismo, nuestro trabajo ha permitido extender la idea de que el problema central, el principal problema de México, es la corrupción; que esa es la causa principal de la desigualdad social; de la desigualdad económica. Por la corrupción, también se desató la inseguridad y la violencia y, eso, fuimos los primeros en plantearlo, en difundirlo y, en comprometernos a que terminemos con esa corrupción; con ese cáncer, que está destruyendo al país.

¡Vamos a acabar con la corrupción; se va a limpiar de corrupción el país! Desde luego para asimilar estas ideas; para lograr esta revolución de las conciencias y la construcción de una voluntad colectiva, se ha requerido de un enorme trabajo educativo, de todos, de mucha pedagogía política, de hablar y hablar, en todas las plazas públicas del país; para hacer conciencia.

Ha demandado, también, predicar con el ejemplo. No se puede enfrentar la corrupción, sí no tenemos autoridad moral; sí no tenemos autoridad política. Por eso, hemos podido y nos cree la gente, porque hemos hecho de nuestra vida pública, una línea recta y, estimamos de que eso es lo más importante en nuestra vida: ¡la honestidad; hasta que se acabe nuestra existencia, hasta morir!, siempre vamos a actuar de manera consecuente.

“En política, la línea recta es la más corta” [Benito Juárez García]

La honestidad es lo que estimo más importante en mi vida. Esto que hemos logrado, también se ha hecho, porque hay muchas convicciones en este movimiento. Hay veces que se piensa, que los movimientos ejemplares, se han dado en países extranjeros, se habla de experiencias en otras partes, pero sin exagerar, de manera objetiva, puedo decirles a ustedes, que este movimiento de millones de mexicanos, mujeres y hombres, que trabajan de manera voluntaria, por la transformación del país, si no es el más importante del mundo, es uno de los más importantes que hay actualmente, en todo el mundo.

¡Por la convicción! de ustedes, de la gente, y también, todo ha sido posible, por la perseverancia; por la terquedad; por la necedad; por no abandonar la lucha; por no claudicar; por no vendernos; por seguir insistiendo; por caer y levantarnos y, volver a caer y volver a levantarnos, hasta lograr lo que pronto se va a conseguir: ¡La transformación de México!

Es complejo este proceso, difícil. Exige de esfuerzo, de sacrificio. Exige de muchas fatigas pero,… de que se puede, se puede. Si se puede. ¡Nuestro movimiento es el mejor ejemplo! En poco tiempo, hemos contribuido en forma decisiva, a cambiar la mentalidad de amplios sectores de México.

Los pueblos, en su esfuerzo constante porque triunfen los ideales de libertad y justicia, se ven precisados en determinados momentos históricos a realizar los mayores sacrificios [Francisco I. Madero]

Hemos puesto en evidencia, las formas de manipulación y control del actual régimen y, hemos dejado en claro que el PRI y el PAN, representan lo mismo, el PRIAN. Hoy, la gente es más consciente, de la existencia de un pequeño grupo, qué controla las instituciones. La gente entiende mejor cómo domina ese grupo y, de su desmedida ambición, de su desmedida avaricia.

Pienso que hasta ahora, el internalizar estas ideas en todo el pueblo, ha sido la mayor aportación, social y política, de nuestro movimiento. Tengamos presente que no se puede cambiar, lo que no se conoce y, que lo que bien se comprende, difícilmente se olvida. Fruto de este trabajo de concientización, es el despertar de muchos ciudadanos de clase media, que antes hasta nos insultaban y que ahora nos respetan y qué votarán por nosotros el domingo próximo.

Otro tanto, ocurre, con la mayoría de los jóvenes. ¡Miren lo que son las cosas! Soy el candidato de más edad, pero los jóvenes, con su imaginación, su rebeldía, su talento, su frescura, saben que nosotros ¡representamos lo nuevo!

Saben los jóvenes, que nosotros representamos, la modernidad, pero forjada desde abajo y para todos, con base en lo logrado, buscaremos emprender, de ahora hacia delante, una transformación pacífica y ordenada; una transformación sin violencia.

Esto es algo también muy importante. Las tres transformaciones que ha habido, la Independencia, la Reforma, la Revolución, se tuvieron que hacer con las armas. No lo querían así, los padres de nuestra patria. Nuestros héroes, Hidalgo y Morelos, eran sacerdotes, pero tuvieron que encabezar al pueblo, para conseguir la transformación, el movimiento de Independencia y que México se convirtiera en un país libre y soberano.

Juárez decía: ¡Nada por la fuerza! ¡Todo por la razón y el derecho!, pero tuvo que encabezar la Guerra de Reforma y luego la resistencia ante la Intervención Francesa. Madero era pacifista y fue el que llamó al pueblo a tomar las armas, el 20 de noviembre de 1910, para derrocar a la dictadura porfirista.

“No se puede gobernar a base de impulsos de una voluntad caprichosa, sino con sujeción a las leyes. No se pueden improvisar fortunas, ni entregarse al ocio y a la disipación, sino consagrarse asiduamente al trabajo, disponiéndose a vivir, en la honrada medianía que proporciona la retribución que la ley les señala” [Benito Juárez García]

¡Miren, nosotros ahora, lo afortunados que somos! Estamos a punto de llevar a cabo una transformación sin derramamiento de sangre, de manera pacífica y no, se debe de confundir nadie; no porque va a ser una transformación pacífica ordenada, se va a quedar por encimita, se va a quedar en la superficie. ¡No! va a ser igual de profunda, como la Independencia, como la Reforma, como la Revolución. Va a ser una transformación pacífica, ordenada, pero profunda y diría, ¡radical! ¡Y que nadie se asuste!, porque la palabra radical viene de raíz y esta transformación va a consistir, precisamente, en arrancar de raíz al régimen corrupto, de injusticias y de privilegios.

Amigas y amigos, concluido el proceso electoral y, hasta que tomemos posesión, el primero de diciembre, nos dedicaremos a elaborar el Programa de Gobierno, que está ya esbozado en el Proyecto de Nación, 2018-2024 y que llevaremos a la práctica con la participación de la gente, ¡porque va ser un gobierno del pueblo, para el pueblo y con el pueblo!

AQUÍ DESTACO ALGUNAS ACCIONES ESENCIALES O COMPROMISOS, QUE DEFINIRÁN LA TRANSFORMACIÓN NACIONAL:

Habrá un auténtico Estado de Derecho, bajo la premisa liberal, de que ¡Al margen de la Ley, nada y por encima de la Ley, nadie!

Seremos respetuosos de la división de poderes y de la soberanía de Estados y municipios. Como decía Juárez. Ya lo cité: ¡Nada por la fuerza! ¡Todo por la razón y el derecho! Nos vamos a guiar con ese criterio.

“La soberanía dimana inmediatamente del pueblo, que sólo quiere depositarla en sus representantes dividiendo los poderes de ella en Legislativo, Ejecutivo y Judiciario, eligiendo las provincias sus vocales y éstos a los demás, que deben ser sujetos sabios y de probidad” [José María Morelos y Pavón]

Nadie será espiado, perseguido, reprimido, desterrado. Dejará de existir como tal, la oficina CISEN, la oficina de espionaje del gobierno. Habrá pleno respeto a las manifestaciones de las ideas, a las libertades civiles y religiosas y, se garantizará el derecho a la crítica, el derecho a disentir.

“La emisión de las ideas por la prensa debe ser tan libre, como es libre en el hombre la facultad de pensar” [Benito Juárez García]

Se establecerá una auténtica democracia, desde la Presidencia de la República. Promoveremos que las elecciones sean limpias y libres. Combatiremos las prácticas ilegales y perversas, de compra de votos.

“Al conquistar nuestras libertades hemos conquistado una nueva arma; esa arma es el voto” [Francisco I. Madero]

Se acabará con las amenazas, con el uso faccioso del presupuesto, en beneficio de candidatos y partidos. Aún cuando asumo el compromiso de convertirme en guardián de las libertades políticas, como decía Francisco I. Madero, pondremos mucha atención en el nombramiento del nuevo fiscal electoral y, se propondrá, para este importante cargo, a una persona honrada, incorruptible, imparcial, recta.

Además, enviaremos una iniciativa de reforma al Congreso, para convertir los delitos electorales, en delitos graves, a fin de poder enviar a la cárcel, sin derecho a fianza, a funcionarios, dirigentes de partidos y ciudadanos, que violen el principio de Sufragio Efectivo, en toda la extensión de la palabra.

Acabaremos, como ya lo exprese, con la corrupción. La voluntad política del Presidente estará empeñada en ello, nadie gozará de impunidad. Esto incluye, desde luego, a los amigos, a los compañeros y a los familiares y, se acabará el influyentismo. Ningún grupo o persona, por poderosa que sea, hará negocios ilegales, al amparo del poder público.

Se castigará con severidad a quienes se apoderen del dinero o de bienes, del pueblo o de la Nación. Actuaré con el ejemplo; enviaré una iniciativa al congreso para reformar el Artículo 102 de la Constitución, con el propósito de que el Presidente en funciones, pueda ser juzgado por delitos de corrupción.

Asimismo, me someteré a la prueba de la revocación del mandato. Es decir, a la mitad de sexenio, dentro de tres años, se preguntará a los ciudadanos, si quieren que el presidente continúe o que renuncie; porque en una verdadera democracia, en una democracia participativa, el pueblo pone y el pueblo quita.

Es el pueblo, el que debe tener, siempre, las riendas del poder en sus manos. Es, en una democracia, el pueblo, el que verdaderamente manda, el que verdaderamente debe mandar. El nuevo Presidente de México, contará con autoridad moral y política, para pedir a todos, un recto proceder y llamará a poner por delante la honestidad, como forma de vida y cómo forma de gobierno.

Con esta determinación, llevada a la práctica, se moralizará al país; mejorará la imagen de México en el extranjero y, vamos a ahorrar lo mucho, que ahora se roban los políticos corruptos y los traficantes de influencias.

Habrá un gobierno austero, sencillo, sin lujos, sin privilegios…

Se reducirán los sueldos de los altos funcionarios públicos, para aumentar los sueldos de los de abajo. También en esto pondré el ejemplo, voy a ganar menos de la mitad de lo que recibe Enrique Peña Nieto, sin compensaciones, de ninguna índole.

No habrá derroche, ni gastos superfluos. No viviré en los Pinos. Esa residencia se convertirá en un espacio para el arte y la cultura de nuestro pueblo. No viajaré en el avión presidencial. Se venderá toda la flotilla de aviones y helicópteros, que actualmente tienen a su servicio los altos funcionarios públicos.

Sólo tendrán escoltas, quienes trabajen en tareas de seguridad. No usaré los servicios del Estado Mayor Presidencial, que pasará a plenitud, a formar parte, de la Secretaría de la Defensa Nacional.

Se cancelarán las pensiones a los ex presidentes. No habrá caja de ahorro especial, ni atención médica privada, para los altos funcionarios públicos. Se eliminarán estructuras administrativas innecesarias y duplicadas. Se reducirá a lo mínimo, el gasto destinado a viajes al extranjero, a congresos, al pago de asesorías, a la publicidad y sólo, en muy pocos casos, habrá asesores y secretarios particulares.

Todo lo que ahorremos, por no permitir la corrupción y con el plan de austeridad republicana, se destinará a financiar el desarrollo. Estoy seguro que el presupuesto rendirá y nos alcanzará para cumplir todos los compromisos con la gente, sin aumentar, en términos reales, los impuestos. Me comprometo, juro, que en todo el sexenio no van a aumentar, en términos reales, los impuestos. Ni el IVA, ni el impuesto sobre la renta.

No vamos a pedir prestado. No vamos a gastar más de lo que ingrese a la Hacienda Pública. Técnicamente no va haber déficit. No va aumentar la deuda pública y no van a haber gasolinazos.

El presupuesto se orientará a reactivar la economía, a crear empleos y a combatir la pobreza. Será prioritario fortalecer la actividad productiva y el mercado interno. Fomentaremos el desarrollo, desde las distintas regiones del país. Se rescatará el campo.

Se impulsará la industria de la construcción y la industria dedicada a la fabricación de ropa, de calzado y de otras mercancías. Se rescatará el sector energético. El propósito es producir las gasolinas, el diesel, el gas y la energía eléctrica que consumimos, para dejar de comprar estos insumos en el extranjero y reducir los precios de los energéticos, en beneficio de los consumidores y de las empresas nacionales.

Procuraremos que la emigración sea optativa y no necesaria. Nos esforzaremos en lograr que las personas, la gente, encuentren trabajo y bienestar en sus lugares de origen, donde están sus familiares, sus costumbres y su cultura. Que el que quiera irse, se vaya por gusto, no por necesidad.

Lo que queremos es convertir a México en una gran potencia, y tenemos los elementos que se necesitan. Tenemos dos elementos, de tres que se requieren. Tenemos muchos recursos naturales, todavía. Muchas riquezas, a pesar de que han saqueado al país, México es de los países con más riqueza en el mundo. Segundo, tenemos un pueblo bueno y sobre todo, trabajador. Ahí está el ejemplo de los migrantes, que están enviando 28 mil millones de dólares, a sus familiares.

“Un buen gobierno solamente puede existir cuando hay buenos ciudadanos”  [Francisco I. Madero]

Ya estás remesas de dinero, son la principal fuente de ingresos que tiene nuestro país, más que el turismo, más que cualquier rama económica, más que el petróleo.

¿Qué demuestra esto?

Que nuestro pueblo no es flojo, no es indolente. Nuestro pueblo es trabajador. Entonces tenemos esos dos elementos, muchos recursos naturales, es decir, riquezas y un pueblo trabajador.

¿Qué falta?

Y se va a tener pronto, muy pronto, un buen gobierno, para convertir a México en una potencia económica y, un ejemplo de desarrollo social, en el concierto de las naciones. Nuestro Programa de Desarrollo partirá del apoyo a las actividades productivas de las comunidades indígenas y campesinas; así como la creación de oportunidades de empleo para trabajadores de colonias urbanas populares.

Vamos a distribuir una canasta de alimentos a precios bajos. Se garantizará a los jóvenes, el derecho al estudio y el derecho al trabajo. Lo resumo en una frase: “Becarios si, sicarios, no”.

Se cancelará la mal llamada Reforma Educativa. Vamos a elaborar con los maestros y los padres de familia, un plan educativo, para mejorar de verdad, la calidad de la enseñanza, sin afectar los derechos laborales del magisterio. Vamos a fortalecer la educación pública, gratuita y, de calidad, en todos los niveles escolares.

“Libre, y para mi sagrado, es el derecho de pensar… La educación es fundamental para la felicidad social; es el principio en el que descansan la libertad y el engrandecimiento de los pueblos” [Benito Juárez García]

Habrá atención médica y medicamentos gratuitos.

No se privatizará el agua. Ese acuerdo, que acaban de firmar, va para atrás.

Aumentará al doble, la pensión a los adultos mayores y también se entregará este apoyo a jubilados del ISSSTE y del Seguro. Daremos atención especial a personas con discapacidad. Todos los discapacitados pobres, tendrán una pensión mensual igual que los adultos mayores y además, se va a atender a personas con discapacidad, niños o adultos, con atención especial de salud y en lo educativo.

Daremos también mucha atención a la ciencia y a la innovación tecnológica. Se apoyará mucho el deporte, porque además de su importancia, como una actividad profesional, será parte fundamental, del Plan de Salud Pública.

Y todas nuestras acciones, todas, todas, se guiarán por el respeto a la cultura de las poblaciones y por el respeto al medio ambiente. Vamos a proteger el medio ambiente. No se va a destruir el territorio. Tenemos que entregar buenas cuentas a las nuevas generaciones.

Daremos apoyo especial a quienes sufren por carencias y olvido. Nuestro gobierno atenderá a todas y a todos. Respetará a todos, pero dará preferencia a los pobres. Lo haremos como siempre, por convicción, pero también, porque en una sociedad desigual, como la nuestra, es casi imposible conseguir la paz, sin que haya justicia y bienestar.

Está demostrado que en los países, donde no hay corrupción, no hay pobreza y no hay inseguridad, ni violencia. Suecia, Dinamarca, Noruega, Nueva Zelanda; hay muchos ejemplos. Nosotros desgraciadamente tenemos el problema de la corrupción y, por eso, hay mucha pobreza y, por eso, se desató la inseguridad y la violencia.

Actuaremos con eficacia para combatir a la llamada delincuencia organizada. No podemos permanecer indiferentes, cuando se están cometiendo 89 homicidios diarios. El saldo por la violencia, en los últimos tiempos, es terrible y al mismo tiempo entristece. Desde el inicio de Calderón, a la fecha, han sido asesinadas más de 230,000 personas. Según cifras oficiales, hay 36,000 desaparecidos y, son alrededor de un millón, los familiares de víctimas, enlutados y dañados, por la violencia.

Vamos a enfrentar estos graves problemas, sin violar los derechos humanos. No voy a delegar esta responsabilidad. La asumiré. Yo voy a coordinar, el Gabinete de Seguridad del Gobierno Federal. Se acabará la dispersión y, habrá trabajo conjunto de todas las corporaciones policiacas y militares.

Todos los días, desde las 6 de la mañana, me reuniré con el Secretario de la Defensa, con el de Marina, con el Fiscal General, con el Secretario de Seguridad Pública y con la Secretaria de Gobernación, para recibir el reporte de los delitos cometidos, en las últimas 24 horas y tomar, todos los días, las decisiones necesarias.

De igual forma, se establecerán coordinaciones territoriales, en cada una de las regiones del país, para actuar de manera conjunta. La política de seguridad será definida después de nuestro triunfo, después del domingo, porque primero, vamos a convocar a familiares de víctimas; a personalidades religiosas; a defensores de derechos humanos; a representantes de la ONU y de organizaciones sociales, así como a especialistas, para analizar todas las opciones, todas las alternativas, convenientes para lograr la pacificación del país.

También convocaré a los habitantes de nuestro país, de nuestro México, para construir un consenso ético, que resulta indispensable, para tener una mejor convivencia. Con este propósito, daremos prioridad a la elaboración y divulgación de una constitución moral, no obviamente como un instrumento jurídico, ni como intromisión del Estado, en la vida privada de los ciudadanos, sino como expresión de los valores fundamentales, que nos hermanan y que, sobreviven, incluso, tras el envilecimiento y la nefasta destrucción del tejido social, que se padece en estos tiempos de decadencia.

Necesitamos fortalecer los valores culturales, morales, espirituales. No sólo buscaremos el bienestar material, sino también buscaremos el bienestar del alma. Repetimos una y otra vez y, se va a llevar a la práctica: Sólo siendo buenos, podemos ser felices. Tenemos que fortalecer valores, no sólo de pan vive el hombre y, que nadie se confunda, estos valores existen y se llevan a la práctica, desde tiempos muy antiguos, desde antes de la existencia de Jesúscristo.

Desde la época de los griegos, se hablaba ya de estos valores: del amor al prójimo; de buscar la felicidad, no sólo acumulando bienes materiales o riquezas. La felicidad verdadera es estar bien con uno mismo; estar bien con nuestra conciencia y, estar bien con el prójimo. Esto lo tenemos que fortalecer, todavía, a pesar de la mancha de individualismo que se ha venido extendiendo. Todavía en las comunidades se repite que, hay que hacer el bien, sin mirar a quien. Eso se tiene en las familias, en los pueblos, en las comunidades, una gran reserva de valores, para regenerar la vida pública del país.

Mantendremos relaciones cordiales, con todos los países del mundo. La globalidad, según nuestra concepción, no debe significar guerra, ni hegemonía, sino fraternidad y cooperación entre los pueblos y las naciones. Nos apegaremos a los principios constitucionales de no intervención, autodeterminación de los pueblos y solución pacífica de las controversias.

“El principio de no intervención es una de las primeras obligaciones de los gobiernos, es el respeto debido a la libertad de los pueblos y a los derechos de las naciones” [Benito Juárez García]

En la relación con Estados Unidos, habrá disposición para dialogar y llegar a acuerdos. En su momento, le propondremos al presidente  Donald Trump, un tratado amplio e integral, con Canadá, qué incluya también, a los países centroamericanos, algo parecido a lo que fue la Alianza para el Progreso, enfocado no sólo al comercio, sino que incluya también, la cooperación para el desarrollo regional, la creación de empleos, los salarios, la migración, la seguridad, entre otros asuntos.

Por geopolítica, por vecindad, por amistad, por economía, por comercio, porque viven más de 12 millones de mexicanos, en Estados Unidos. Por todo eso, tenemos que llegar a acuerdos. Estamos obligados y a entendernos y a caminar juntos. No le faltaremos el respeto, al gobierno de Estados Unidos, porque no queremos que nadie ofenda a nuestro pueblo y a la nación mexicana.

México, es un país libre y soberano. Nunca será piñata de ningún gobierno extranjero

“Todo lo que México no haga por sí mismo para ser libre, no debe esperar, ni conviene que espere, que otros individuos u otras naciones hagan por él” [Benito Juárez García]

Amigas y amigos, para hacer realidad estos propósitos, que todos compartimos, estoy seguro, los llamo, los exhorto a salir a votar el domingo y a cuidar las casillas. Nada de confiarnos. Estamos más de 20 puntos arriba. Hoy se publican encuestas que registran que estamos muy arriba del segundo lugar, pero,… tenemos que lograr una victoria contundente. Todos debemos de participar el domingo, que sea un voto masivo, por la transformación de México.

Ayudar para que familiares, amigos, compañeras, compañeros de trabajo, vecinos, ¡participen! Que nadie se quede sin ir a votar. Nada de que ya ganamos, ¿para qué voy?, ¡si ya estamos arriba!

¡No! ¡Todos a votar! ¡Que se tenga muy buena participación! ¡Vale más que sobre y no que falte!

Esto es un asunto muy importante. No son las encuestas, es el resultado de la votación del domingo. Todos a participar. Vamos a ganar, pero nuestro triunfo, repito, debe ser contundente.

Será todo un acontecimiento, un hecho histórico. Se consumará la victoria frente a la inmoralidad y la decadencia de los últimos tiempos. Va a perder, como se llame el partido conservador, pero no habrá represalias.

Buscaremos la unidad, hasta donde se pueda, pero tampoco vamos apostar a la unanimidad, al pensamiento único. Estamos construyendo una auténtica, una verdadera democracia, que significa libertades, pluralidad. ¡No estamos construyendo una dictadura!

“Estoy más orgulloso por las victorias obtenidas en el campo de la democracia que por las alcanzarlas en los campos de batalla” [Francisco I. Madero]

No va a ver una sola voz, una sola opinión. Se va a respetar la diversidad, se va a respetar el derecho a disentir. Nuestros opositores siempre tendrán respeto y nunca los veremos como enemigos.

Vamos al cambio, por el camino de la concordia

¡México, somos todos! Eso es lo que debe de entenderse. El gobierno debe representar a todos. Me lo dijo un migrante poblano, en San Quintín, Baja California, en un mitin, me alcanzó después del acto, para decirme: Licenciado, así como el presidente Juárez separó el Estado de la iglesia, porque a Dios lo que es de Dios y al César lo que es del César. Ahora lo que se necesita, Licenciado, es que se separe el poder político, del poder económico y que el gobierno represente a todos, a ricos y a pobres, que ya no esté el gobierno al servicio de una minoría, que el gobierno no esté convertido, en un comité, al servicio de unos cuantos.

Que haya una auténtica democracia, un gobierno que represente a todo el pueblo, que represente, repito, a todas las clases sociales, que represente a creyentes y no creyentes y que, en un ambiente de libertades plenas, respetando a todos, con la libertad en alto, libertad de manifestación de las ideas, libertad de prensa, libertad religiosa.

Con esas libertades podamos construir una sociedad mejor, más justa, más igualitaria, más democrática. Que podamos construir, ¿por qué no? aquí en la tierra, en nuestro querido México, el reino de la justicia, que podamos construir una República, amorosa, una República fraterna,…

¡No les voy a fallar!

¡Soy un hombre de convicciones y principios!, ¡Ya lo exprese!

¡Mi honestidad, no tiene precio y, tengo, tengo, lo confieso y, tengo,… una ambición legítima: Quiero ser un buen presidente de México!

¡Quiero seguir el ejemplo de Benito Juárez, quiero seguir el ejemplo de Francisco I. Madero, quiero seguir el ejemplo del General Lázaro Cárdenas del Río!

Juntos, juntos

¡Haremos historia!

¡Viva México!, ¡Viva México!, ¡Viva México!